Pues eso, los dos patitos, a un paso de las Navidades, con rumores ya de que Sainz puede correr el próximo Portugal, y tras cerrársele todas las puertas a Solá, poco nos consuela más que saber que Pons se subirá a un WRC en alguna carrera y que el futurible Dani Sordo, intentará el Mundial Junior con los S1600. Y en vísperas de festejos Navideños, nosotros presentamos nuestro álbum número 49, deseándoos unas Felices Navidades y un Próspero año 2005 con olor a gasolina.

Esperamos que os guste.

		Con uno de los coches del RACC afrontaba Salvador Cañellas Jr. el Campeonato de España de Rallyes de Asfalto 2000 y se puede decir que su acoplamiento al Córdoba WRC fue perfecto a juzgar de las trazadas que se marcó y los tiempos que realizó. Quedando como muestra esta cruzada en la estación del tramo de Troncedo, del Rallye de Avilés, ante la cámara de Roberto de Trevías.
		Nos ubicamos de nuevo en Castrillón en la Subida correspondiente al 2004 y más concretamente a la manga de entrenos, donde, no sabemos todavía como, Jairo Álvarez realiza este trompo a pocos metros de la Gran Paella de Merou. Omar estaba allí para fotografiar el Opel Corsa ex-Palacio de esta guisa.
		Le toca el turno al hombre espectáculo, que allá por el año 2001 se jugaba el Campeonato de España de Rallyes de Tierra en Cangas con un Subaru ex-oficial y que por problemas mecánicos se quedó apartado muy pronto. Se trata de Luis Climent que justo antes de una de las paellas del Acebo frenaba el coche nipón de esta manera. Para mostrarlo, Gonzalín.
		Parece que Roberto de Trevías atrae los derrapes porque, gente como Juan R. Llorián al toparse con su cámara zampan el coche dando un espectáculo agradecido por todos, o eso parece. En plena acción lo vemos en esta foto correspondiente al Rallysprint de Gijón del 2003, donde el Escort se comporta casi como un MK.
		Ahora nos plantamos en el Mundial, en la prueba que despedía a Sainz como piloto profesional, El Cataluña 2004. El piloto que muestra Hugo en esta secuencia de fotos, es el irlandés Paddy White, que con su Subaru privado, el último día de rallye, se marcaba este trompo, en el tramo de San Boi de Lluçanés o lo que es lo mismo, La Trona al revés. (Menos mal que no faltaron cuatro gotas, como los días anteriores...).

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